"Lo que denuncia Karina Saúl, ya fue aclarado"El vicegobernador Fabián Leguizamón realizó un descargo en sus redes sociales, al enterarse por medios kirchneristas de una denuncia que habría realizado la esposa del ex vicegobernador Pablo González. Uno de los medios que lo publicó estaría reclamando una deuda millonaria que les dejó la gestión de Alicia Kirchner, y según el propio Leguizamón es "con el único objetivo de tapar los anuncios históricos que hizo el gobierno el día de ayer."
El Vicegobernador Leguizamón no oculta su sorpresa ante la última jugada de la vocal de la minoría del Tribunal de Cuentas, Karina Saúl. La esposa del ex vicegobernador Pablo González -con claros lazos con la gestión anterior- presentó una denuncia penal contra el propio Leguizamón en base a observaciones ya aclaradas de una auditoría anterior. Lo curioso es que se enteró de esta denuncia no por canales institucionales, sino por medios claramente alineados con González, como la Opinión Austral y Primicia Santa Cruz.
Leguizamón se pregunta abiertamente por qué parece que las operaciones mediáticas y judiciales sólo apuntan contra él, justo después de que el Gobierno realizara anuncios históricos para la provincia. "A nadie más le arman estas operaciones, habría que preguntarse por qué", lanzó con ironía, dejando en claro que ve una intencionalidad detrás de cada movimiento.
Lo que más le llama la atención es la "paradoja" que deja en evidencia al Tribunal de Cuentas: mientras se apresuran a judicializar un tema menor ya resuelto, guarda un preocupante silencio sobre hechos mucho más graves vinculados a gestiones pasadas. Por ejemplo, en 2023 el exgobernador Quiroga retiró 35 millones de pesos sin rendir cuentas, y durante los últimos diez años -bajo intendencias del FVS- numerosos municipios no presentaron rendiciones ante el Tribunal de Cuentas. Tampoco lo hicieron funcionarios del IDUV ni diversos ministerios durante la gestión de Alicia Kirchner.
"¿Dónde están las denuncias por todo eso?", se preguntó Leguizamón, quien asegura estar a disposición total de la Justicia. Solo pide una consideración mínima: "Tratar de enterarme por los canales judiciales antes que por los medios militantes de siempre".
Entre la sorpresa, la indignación y la ironía, el Vicegobernador dejó en claro que el verdadero escándalo es la selectividad con la que algunos actores eligen a quién controlar y a quién no.
El Vicegobernador Leguizamón no oculta su sorpresa ante la última jugada de la vocal de la minoría del Tribunal de Cuentas, Karina Saúl. La esposa del ex vicegobernador Pablo González -con claros lazos con la gestión anterior- presentó una denuncia penal contra el propio Leguizamón en base a observaciones ya aclaradas de una auditoría anterior. Lo curioso es que se enteró de esta denuncia no por canales institucionales, sino por medios claramente alineados con González, como la Opinión Austral y Primicia Santa Cruz.
Leguizamón se pregunta abiertamente por qué parece que las operaciones mediáticas y judiciales sólo apuntan contra él, justo después de que el Gobierno realizara anuncios históricos para la provincia. "A nadie más le arman estas operaciones, habría que preguntarse por qué", lanzó con ironía, dejando en claro que ve una intencionalidad detrás de cada movimiento.
Lo que más le llama la atención es la "paradoja" que deja en evidencia al Tribunal de Cuentas: mientras se apresuran a judicializar un tema menor ya resuelto, guarda un preocupante silencio sobre hechos mucho más graves vinculados a gestiones pasadas. Por ejemplo, en 2023 el exgobernador Quiroga retiró 35 millones de pesos sin rendir cuentas, y durante los últimos diez años -bajo intendencias del FVS- numerosos municipios no presentaron rendiciones ante el Tribunal de Cuentas. Tampoco lo hicieron funcionarios del IDUV ni diversos ministerios durante la gestión de Alicia Kirchner.
"¿Dónde están las denuncias por todo eso?", se preguntó Leguizamón, quien asegura estar a disposición total de la Justicia. Solo pide una consideración mínima: "Tratar de enterarme por los canales judiciales antes que por los medios militantes de siempre".
Entre la sorpresa, la indignación y la ironía, el Vicegobernador dejó en claro que el verdadero escándalo es la selectividad con la que algunos actores eligen a quién controlar y a quién no.