Mural recordando al Padre Carlos MugicaDurante este fin de semana se vieron múltiples homenajes en todo el país que se realizaron en memoria del Padre Carlos Mugica, quien fuera asesinado el 11 de mayo de 1974 en manos de la Triple A.
El mas resonante se llevó a cabo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires donde, con la presencia de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, se dejó inaugurada una escultura del “cura villero” como se lo conocía en virtud del trabajo social que llevaba adelante uno de los referentes mas importantes del Movimiento de Sacerdotes para el Tercer Mundo.
Durante su discurso la Presidenta contó que: "Mugica quedó impactado porque, al producirse el golpe de 1955, fue a un conventillo y vio escrito 'Abajo los cuervos'. Aquella era una Argentina violenta en serio", recordó, en alusión al rol protagónico que tuvo la jerarquía católica en la organización del golpe a Perón. Antes se había comunicado por videoconferencia con el Diputado Nacional por esa ciudad, Juan Cabandié, quien estaba presente en la Villa 31 junto a los vecinos que recordaron a Mugica en el barrio donde desarrolló gran parte de su labor comunitaria y donde hoy descansan sus restos.
Al mismo tiempo, en Río Gallegos, militantes de La Cámpora, lo recordaron pintando un mural en la calle Crucero General Belgrano, sobre el lateral de una casa que un vecino complacido cedió. La pintura lleva el rostro de Carlos Mugica, quien es considerado por sus seguidores como un ejemplo de coherencia entre las ideas y la acción, y de fortaleza de fe, la cual trabajaba en forma constante, instando a quienes lo rodeaban a no claudicar. Al lado de su rostro puede leerse la frase: “Ahora mas que nunca debemos estar junto al Pueblo” adjudicada al Padre como sus últimas palabras en el momento de ser acribillado por la organización terrorista de extrema derecha Alianza Anticomunista Argentina que conducía López Rega, en la puerta de la iglesia de San Francisco Solano hace 40 años.
El mas resonante se llevó a cabo en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires donde, con la presencia de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, se dejó inaugurada una escultura del “cura villero” como se lo conocía en virtud del trabajo social que llevaba adelante uno de los referentes mas importantes del Movimiento de Sacerdotes para el Tercer Mundo.
Durante su discurso la Presidenta contó que: "Mugica quedó impactado porque, al producirse el golpe de 1955, fue a un conventillo y vio escrito 'Abajo los cuervos'. Aquella era una Argentina violenta en serio", recordó, en alusión al rol protagónico que tuvo la jerarquía católica en la organización del golpe a Perón. Antes se había comunicado por videoconferencia con el Diputado Nacional por esa ciudad, Juan Cabandié, quien estaba presente en la Villa 31 junto a los vecinos que recordaron a Mugica en el barrio donde desarrolló gran parte de su labor comunitaria y donde hoy descansan sus restos.
Al mismo tiempo, en Río Gallegos, militantes de La Cámpora, lo recordaron pintando un mural en la calle Crucero General Belgrano, sobre el lateral de una casa que un vecino complacido cedió. La pintura lleva el rostro de Carlos Mugica, quien es considerado por sus seguidores como un ejemplo de coherencia entre las ideas y la acción, y de fortaleza de fe, la cual trabajaba en forma constante, instando a quienes lo rodeaban a no claudicar. Al lado de su rostro puede leerse la frase: “Ahora mas que nunca debemos estar junto al Pueblo” adjudicada al Padre como sus últimas palabras en el momento de ser acribillado por la organización terrorista de extrema derecha Alianza Anticomunista Argentina que conducía López Rega, en la puerta de la iglesia de San Francisco Solano hace 40 años.