El Secretario General del gremio docente de Santa Cruz (ADOSAC) Pedro Cormack, realizó un planteo del posicionamiento político que tiene el gremio y se diferenció expresamente de otros sindicatos, no solo en la provincia, como es el caso de UPCN y APAP, quienes en la última paritaria aceptaron de manera inconsulta un magro aumento salarial impuesto por el gobierno de Alicia Kirchner, sino también de otros sindicatos a nivel nacional, que en muchas oportunidades acompañaron los ajustes de gobiernos anteriores o del actual, con evidente rasgo neoliberal.

Con motivo de la aceptación por parte de UPCN y APAP de la magra propuesta salarial realizada por el gobierno provincial, que se concretó el pasado 28 de abril, consistente en 1.500 pesos remunerativos, retroactivos al mes de abril y aumentos en ítems como títulos, antigüedad, para todo el ámbito de la administración pública central de la provincia, la ADOSAC plantó posición ante esta situación que podría ser utilizada por el Ejecutivo para forzar y/o condicionar salarios en negociaciones paritarias con otros sindicatos y a raíz de ello, el Secretario General del gremio docente, Pedro Cormack, realizó declaraciones que tuvieron como propósito dejar sentada la diferencia conceptual y política de lo que es un gremio y cómo se conciben los principios de la democracia sindical en el ámbito de la ADOSAC.

Cormack, atacó directamente a las cúpulas de esos sindicatos (sean nacionales o provinciales), como motores de la entrega de aquellos a los que dicen representar, pero finalmente terminan haciéndole un mal mayor, a veces por causas ideológicas y otras por intereses espurios “No se puede permitir tan repudiable y despreciable acción – dijo el dirigente, refiriéndose la aceptación unilateral e inconsulta de un magro aumento - obviando el interés de afiliados y trabajadores de la administración pública en general” y agregó “desde ADOSAC, las acciones gremiales nacen de las asambleas y se debate en los Congresos provinciales con la participación de todas las filiales”, dijo, para diferenciarse de aquellos gremios cuya dirigencia toma decisiones unilaterales.

“La verdadera democracia sindical le dá voz y entidad a quienes estos pseudos-dirigentes intentan silenciar. Esto nos indica, que existe otra forma de pensar y hacer sindicalismo”, remarcó Cormack en este sentido.

Sobre la necesidad de democratizar a los gremios y de no tomar decisiones inconsultas, puso como ejemplo el aspecto procedimental que utiliza ADOSAC, en relación a otros sindicatos similares, como el de Buenos Aires; al respecto recordó “Hablando con un compañero docente de la provincia de Bs As, me decía que su sindicato (SUTEBA) realizaba uno o dos congresos de delegados por año, en Santa Cruz en los últimos tres meses hemos realizado diez congresos con sus respectivas asambleas”.

Cormack se alejó convenientemente del accionar político que tienen algunos sindicatos que abrevan al calor de los gobierno y señaló “El sindicalismo en el que creemos, nada tiene que ver con los Moyano, los Caló y compañía, cómplices del ajuste hacia los trabajadores en el pasado y en la actualidad” y luego se refirió a las actitudes que fueron catalogadas de “entreguista” por los sindicatos que integran la Mesa de Unidad Sindical (MUS), al trasladar sus críticas a los dos gremios provinciales que acaban de cerrar una negociación sumamente desventajosa para los empelados públicas y señaló “y mucho menos, podemos estar de acuerdo con las prácticas reaccionarias de las conducciones de sindicatos como APAP y UPCN” tras lo cual Pedro Cormack agregó “por ello, reivindicamos el posicionamiento de ATE en la última paritaria de la administración pública, denunciando lo fraudulenta de la misma y rechazando ofrecimientos que degradan la condición de trabajador; no por casualidad compartimos con ellos el espacio de la Mesa de Unidad Sindical como lo hacemos con todos aquellos espacios gremiales que pelean en la calle por la dignidad de sus afiliados”, remarcó.

Finalmente, el docente profundizó en las serias consecuencias que tienen las decisiones que se toman en el seno de un sindicato y más aún cuando no se nutre del consenso de las bases y como en el caso de UPCN y APAP toman determinaciones fundamentales en la vida de los afiliados “cuando un dirigente acepta o rechaza una propuesta del gobierno, sin ponerla en discusión de las bases, como hacemos los gremios que practicamos la verdadera democracia sindical, lo que se está haciendo es someter al afiliado y a su familia, en términos de ingresos, a la pobreza y la marginación. No es posible que dirigentes con decisiones equivocadas, a veces con poca o nula representatividad, ponga en riesgo a las familias que deben defender de los abusos del poder” y concluyó “si un dirigente no pelea por nivelar hacia arriba y elevar, no solo el sueldo, sino la dignidad de sus afiliados, ese gremio está en un problema, porque uno de los principales objetivos que tenemos los dirigentes es preservar a nuestros compañeros representados, de los abusos del poder, de los atropellos y el autoritarismo, que, además de vaciarle los bolsillos y ponerlos en el límite de la pobreza, los someten a la aceptación muda de cualquier cosa que quiera imponerle el gobierno”, finalizó diciendo Cormack.